Infraestructura cripto
Por @g_carulla
¿Qué tan descentralizada es la WEB3?
Como ya sabemos un pilar fundamental de lo que se encuentra por debajo de la estructura que conocemos como el ecosistema WEB3 es la descentralización.
En otras entregas de este blog ya hemos expuesto que la centralización puede entenderse como la unificación de ciertos puntos en un centro en común.
Un ejemplo visual que suele usarse para graficar esa situación es la siguiente:
Donde (a) es una red centralizada, (b) es descentralizada y © es distribuida
En el caso de una red centralizada todos los datos se encuentran organizados en un solo nodo y/o computadora, que se encuentra conectada a todos los demás. Es esta computadora central quien tomará las decisiones y las restantes o periféricas deberán acatar esa decisión. Los nodos periféricos sólo pueden tener contacto entre sí pasando por el punto o computadora central .
En el caso de las redes descentralizadas no existe un solo nodo y/o computadora principal, sino que existen nodos intermedios que reciben los datos y la transmiten posteriormente a sus propios periféricos. No todos los nodos o puntos se encuentran interconectados entre sí.
Finalmente tenemos a las distribuidas, en este tipo de redes no existe un centro (individual o colectivo), la información está justamente distribuida entre los nodos y todos tienen acceso a esta. Ninguno de estos nodos y/o computadoras tiene la posibilidad de modificar la información que se maneja en la red, ya que, en este caso, cualquiera de las restantes lo advertiría con facilidad.
De este modo, no existe ni la idea de centro, ni la idea de periferia. Cualquier receptor puede ser asimismo emisor, como seleccionar la fuente de donde recibe la información.
En base a esto, podemos decir que las redes descentralizadas y las distribuidas son muy parecidas, normalmente esto conlleva a la confusión de si una blockchain es un sistema descentralizado o distribuido.
Para conocer esta respuesta debemos analizar sencillamente la principal diferencia entre ambos sistemas a la hora de tomar decisiones:
En un sistema descentralizado no hay un ente único que tome las decisiones, sino que estas son tomadas de forma individual por los nodos y la decisión final se toma en base a mayorías y consensos según los diversos protocolos establecidos en la red. Por el contrario, en una red no distribuida, las decisiones son tomadas por un ente central designado a tal efecto.
Establecido esto vemos que “descentralización” es un concepto poco comprendido. Muchas personas suelen decir que la razón por la que los defensores de las redes cripto abogan por la descentralización es para resistir a la censura del gobierno o porque tienen visiones políticas libertarias. Pero estas no son las principales razones por las que la descentralización importa.
Estas redes utilizan mecanismos de consenso para mantener actualizado su estado, aprovechando el otorgamiento de incentivos para quienes participen en la red y en ese consenso. Algunas redes, como Ethereum, son plataformas generales de programación que pueden usarse prácticamente con cualquier fin. Otras tienen propósitos especiales, por ejemplo, Bitcoin tiene el propósito principal de almacenar valor.
No obstante, a medida que vamos avanzando en el interior de estas redes vemos que muchas de ellas han dejado de lado el foco de la descentralización con la finalidad de aprovechar solo una parte de estas redes distribuidas en su exclusivo beneficio.
Pero han existido incontable cantidad de casos en los que esta centralización de los datos dentro de una red han sido el punto de falla, permitiendo la vulnerabilidad de dichas redes frente al ataque de terceros.
A modo de ejemplo citaremos el caso de la vulneración que sufrió el protocolo Ronin: en marzo del 2022, terceros lograron vulnerar ese sistema mediante la posibilidad de acceder a cinco de un total de nueve nodos que dicho protocolo
Tomando el ejemplo (b) de las redes se vería así:
Donde los puntos rojos vendrían a representar los nodos que, controlados mediante el acceso a sus claves, pudieron vulnerar ese protocolo.
De esta forma, vemos que, una estructura que se encuentra bajo una modalidad centralizada de nodos validadores puede ser simplemente controlada dominando la mayoría, esa es la razón que mientras más nodos validadores se agreguen a la red, estos le añadirán un mayor nivel de descentralización.
Por tanto la descentralización suele concretarse como un espectro que va desde lo más centralizado (como podría ser un banco tradicional usado para almacenar dinero fiat) hacia la descentralización. Existen muchos protocolos de la industria criptográfica que han desechado un amplio margen de descentralización, con la intención de poder ganar en velocidad de operación y en escalabilidad, pero eso implica un control no distribuido, y mientras menos distribuido sea, más propenso a ser atacado y vulnerado será.
De la misma manera la descentralización puede aplicarse al acceso del contenido que circula por la internet en general: Hoy por hoy con la finalidad de simplificar la tarea del usuario final, se crearon las redes de distribución de contenido conocidas por su sigla en inglés como CDN que, básicamente, almacena una pequeña porción del contenido en múltiples ubicaciones geográficas para reenviar.
Esto evitará las demoras que pudiera llegar a percibir el usuario final y eso nos parece algo positivo, sin embargo a medida que esa situación se profundiza nos hallamos cada vez más expuestos a problemas de censura, privacidad y propiedad de datos (sobre este punto se puede señalar las constantes sanciones que aplica el GPDR respecto a violaciones a los estatutos de tratamiento de datos personales).
En este punto es importante tener en cuenta que el 80% del contenido que circula en el internet se encuentra alojado en servidores centralizados como los de Amazon o Google. Por tanto, desde el ecosistema criptográfico han comenzado a surgir soluciones para esto como lo es el protocolo Media Network.
También vale la pena citar el caso de IPFS (de su sigla en inglés, InterPlanetary File System o Sistema de Archivos Interplanetario) proyecto que busca crear una red de de computadoras de alcance global para permitir el almacenamiento de información de forma descentralizada, con una alta escalabilidad, promoviendo, una importante resistencia a la censura al precisamente tener sustento en una arquitectura distribuida por el mundo.
Todas estas situaciones nos permiten considerar que a futuro no tendremos un panorama de blanco o negro y que deberemos de ir recorriendo un trayecto desde un sistema que ha construido sus bases en la centralizacion para la maximización de los beneficios hacia una paulatina descentralización en donde el usuario será quién vaya adoptando la solución que le resulte más adecuada a sus propias necesidades y requerimientos, en donde los protocolos que mejor puedan interpretar esta nueva organización tendrán una mejor proyección a largo plazo.
En este momento la gran mayoría de los protocolos del ecosistema que conocemos utilizan mecanismos descentralizados para la toma de decisiones (como por ejemplo una DAO) pero siguen teniendo gran parte de su estructura tanto en lo visible como en su interior (tanto en su front-end como en su back-end) por lo que siguen encontrándose expuestos a los problemas que ya hemos enunciado en los párrafos anteriores.
Finalmente creemos que es importante reiterar que uno de los principios en los que se basa la creación de los sistemas de redes distribuidas en una cadena de bloques, que solemos llamar block-chains, es precisamente evitar la censura y el control por parte de un único ente centralizado.
Por estas razones dependerá en gran parte de nosotros mismos la posibilidad de comprender que repetir las viejas maneras de comportarnos nos conducirá a los mismos resultados que pretendemos evitar mediante la aplicación de nuevas tecnologías.
Si queremos que el futuro sea realmente descentralizado sería prudente evitar usar sistemas centralizados y dedicarnos a explorar y explotar las nuevas posibilidades que nos han traído los sistemas de registro distribuido, surgidos, como Bitcoin, en la posibilidad de darle al usuario un control real de su dinero.
